¿Qué es una deducción fiscal?
Es ampliamente conocido que para muchas personas, el tema relacionado con los impuestos genera incertidumbre y hasta cierto punto un grado de desconfianza, pudiendo llegar a ser un dolor de cabeza para el contribuyente, es por eso que la Firma aborda el estudio sobre el tema de la deducción fiscal y un ejemplos para mostrar que esta figura puede llegar a ser un gran aliado al momento de presentar las correspondientes declaraciones fiscales.
En principio una Deducción Fiscal Contable se define como el derecho que tiene el contribuyente de disminuir ciertos gastos a los ingresos acumulables para obtener una utilidad, el contribuyente puede restar a los ingresos los gastos indispensables para la obtención de sus ingresos.
Dichas deducciones se rigen mediante la ley que para tal efecto emite el Estado Mexicano con la finalidad de su regulación, un ejemplo de lo anterior es la Ley del Impuesto Sobre la Renta, que en su artículo 29 establece cuales son las deducciones autorizadas y en su artículo 27 se establecen los requisitos que deben contener las deducciones autorizadas por esta normativa.
Un ejemplo de una deducción es el pago de estudios escolares mediante medios electrónicos, además de ser un gasto deducible para una persona física, resulta también una excelente opción para reducir gastos operativos en una empresa o negocio, este beneficio se da siempre y cuando el contribuyente se encuentre dado de alta ante el Servicio de Administración Tributaria como Persona Física con Actividad Empresarial.
Es menester señalar que como una nueva medida que aplica el SAT en este rubro, el gasto sólo será deducible si se sufragó con tarjetas de crédito, débito o de servicios, cheques nominativos o transferencias electrónicas de fondos y de esta forma poder deducirlas del ejercicio fiscal 2015 en su presentación al año siguiente, cabe resaltar que lo anterior será aplicable a montos superiores a $2,000.00 (Dos Mil Pesos 00/100 M.N.). Todas las personas físicas que pagan colegiaturas de escuelas privadas pueden deducir este concepto en la declaración anual de Impuesto sobre la Renta (ISR), incluyendo a los asalariados.
Los niveles educativos que pueden ser deducibles con las colegiaturas son los de nivel preescolar, primaria, secundaria, profesional técnico, bachillerato o su equivalente. La deducción aplica para el pago de su propia formación, hijos, nietos, cónyuge, concubina (o), padres y abuelos, excluyendo a sobrinos o tíos, detalla el decreto de estímulos fiscales para personas físicas. Desafortunadamente las colegiaturas a nivel universitario o profesional no aplican y tampoco son deducibles las inscripciones ni reinscripciones.
Como se puede observar, esta figura es de gran ayuda para reducir costos y así obtener mejores rendimientos en su empresa o negocio a nivel económico y operativo, solo si se encuentra en el régimen que en líneas anteriores ha quedado descrito.