Es bien sabido que en nuestro país, la cultura de la protección en materia de Propiedad Intelectual no tenía mucho auge, sin embargo, en los últimos años, el interés de los particulares al respecto ha tomado gran impulso.

La necesidad de proteger las invenciones de las personas y de las empresas ha crecido demasiado en estos tiempos, debido al aumento de la piratería y al uso indebido de los productos o servicios amparados por las marcas registradas.

Aunque la autoridad encargada de proteger y sancionar en esta materia, fue creada en 1991, hay que hacer mención de que no era muy recurrida, pues insistimos en el tema de que no había mucha difusión sobre la materia y sobre todo no se acostumbraba registrar las invenciones.

Al mencionar a la autoridad nos referimos al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, el cual es un organismo descentralizado, con personalidad jurídica y patrimonio propios, el cual, como autoridad administrativa, tiene como objeto aplicar la Ley de la Propiedad Industrial.

Dentro de sus principales atribuciones está el proteger las invenciones, productos o servicios ofrecidos por particulares o entidades gubernamentales, a través de la concesión de títulos de marcas; avisos comerciales; patentes; registros de modelos de utilidad y diseños industriales; entre otras cosas previstas en la ley de la materia.

El mando de esta entidad recae sobre el Director General, quien además de representar y administrar el Instituto, tiene como atribuciones primordiales:

-Dirigir las actividades de promoción, asesoría, difusión y estudio en la materia de propiedad intelectual, y propiciar el apoyo institucional que se requiera a nivel nacional en el ámbito de sus atribuciones;

-Definir, en coordinación con la Secretaría de Economía y la Secretaría de Relaciones Exteriores, las estrategias de negociación ante los organismos internacionales en que participe el Instituto;

-Conducir, las negociaciones internacionales en materia de solución de controversias relativas a la competencia que al Instituto le confiere la Ley de la Propiedad Industrial, la Ley Federal del Derecho de Autor y demás disposiciones aplicables en la materia y participar en las instancias derivadas de los tratados o acuerdos comerciales internacionales en dicha materia;

-Dirigir la elaboración de estudios y materiales de apoyo a los proyectos relacionados con las negociaciones en materia de propiedad industrial, que le sean solicitados por la Secretaría de Economía u otras dependencias o entidades;

-Nombrar y remover al personal del Instituto.

Así mismo y ya en labores más específicas, el Instituto cuenta con la Dirección Divisional de Marcas y la Dirección Divisional de Patentes, las cuales están encargadas entre otras cosas, de emitir los lineamientos y fomento de las actividades creativas, así como del estudio de forma y fondo sobre las solicitudes de registro de marca y de patentes. Lo cual deriva en el otorgamiento o negación de los títulos de registro correspondientes.

Por otro lado, la Dirección Divisional de Protección a la Propiedad Intelectual, tiene la encomienda de substanciar los procedimientos de nulidad, caducidad y cancelación de los derechos de propiedad industrial, conforme a lo dispuesto en la Ley de la materia, así como formular las resoluciones y emitir las declaraciones administrativas correspondientes y, en general, resolver las solicitudes que se den con motivo de la aplicación de las mismas o cualquier otro acto administrativo tendiente a privar de eficacia jurídica a las autorizaciones, registros, convenios, contratos o cualquier otro que implique contravención a tales disposiciones.

En Bandala & Asociados contamos con personal con amplia experiencia en temas de Propiedad Intelectual y Derechos de Autor, y por ende, en los diversos trámites que se realizan ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial. Si tienes duda sobre estas materias, no dudes en acercarte a nosotros, con gusto te asesoramos.